¿El Regreso?

Para retomar este asunto del blog tuvieron que pasar varios meses e innumerables anécdotas, que relegadas a la débil memoria de un alcohólico empedernido (¿redundancia?), comedor compulsivo, vago profesional, erotómano obsesivo y ferviente seguidor del onanismo (onanismo = doctrina milenaria consistente en la autoexploración de las zonas velludas y/o eréctiles del sujeto. Comunmente denominado "chaqueterismo", "jalarle el cuello al ganso", "tejer una chambrita", "afilar la chaira" o "visitar a Manuelita"), corrieron el riesgo de perderse para siempre en el paraje de polvo y mierda seca que es el olvido...

... pero por fortuna (para mí) o desventura (para el PAN), las únucas tres neuronas que le funcionaban al personaje arriba mencionado se aferraron (como burro cachondo al sexo sin condón) a forzar la sinapsis, de manera que lograron arrancarle un retazo de carnita comestible a las impresiones y experiencias que fueron aconteciendo en este periodo.

Así que, me comprometo con ustedes y repito mi discurso: ¡Aquí están las andanzas!